El impuesto a las bebidas azucaradas se incrementará del 10% al 21% en 2021.
Anfabra y Fiab rechazan rotundamente la medida, que califican de “injusta y discriminatoria”

El IVA de las bebidas azucaradas y edulcoradas se incrementará del 10% actual al 21% el próximo año 2021. Así se recoge en el documento remitido por el Gobierno a la Comisión Europea ayer jueves. La medida forma parte del Plan Presupuestario 2021 que el Gobierno español ha presentado en Bruselas y que incluye las previsiones del cuadro macroeconómico y la evolución de las finanzas públicas en un contexto de pandemia mundial. Entre otros ajustes fiscales recogidos en el documento figura el incremento del IVA de las bebidas azucaradas y edulcoradas del 10% al 21% con el objetivo de “favorecer hábitos más saludables”. Este impuesto, cuyo aumento viene considerándose ya desde hace unos años, forma parte de lo que se denomina gravámenes a las externalidades negativas, cuyo objeto es gravar determinados comportamientos perjudiciales para la salud o el medio ambiente.

En este sentido, el director general de la Federación Española de Industrias de Alimentación y Bebidas (Fiab), Mauricio García de Quevedo, recuerda que estas medidas “no cambian hábitos y además no tienen ningún efecto probado sobre la salud ya que la obesidad y el sobrepeso tienen un origen multifactorial”. De hecho, la Federación ha hecho público un comunicado mostrando su rechazo a una medida que considera “injusta y discriminatoria” y considera que la anunciada subida del IVA “solo tiene un efecto recaudatorio que además va a impactar más gravemente a las rentas más desfavorecidas, las más afectadas por la crisis”.

En los mismos términos se ha expresado la Asociación de Bebidas Refrescantes (Anfabra), que considera además que con esta propuesta el Gobierno da “la puntilla” a la hostelería. De hecho, recuerda que estos establecimientos vienen reclamando una bajada del IVA al 4% para ayudar a reducir el impacto de las constantes restricciones y cierres, tal y como se está haciendo en otros países (Alemania, Austria, Bélgica y Reino Unido, entre ellos). Al tiempo, Anfabra manifiesta que el hecho de querer gravar las bebidas azucaradas o edulcoradas “carece de rigor científico”, puesto que son “productos seguros y evaluados por la Agencia Europea de Seguridad Alimentaria (Efsa). Y añade que el sector apuesta por la promoción de hábitos saludables y compromisos voluntarios, entre ellos la reducción del contenido de azúcar en estas bebidas, que según sus datos habría alcanzado un 35% entre 2005 y 2018.

una lata de Coca Cola antes de la subida del IVA a las bebida azucaradas y después. Si a día de hoy cuestan 0,65 céntimos de euro, el incremento del Impuesto de Valor Agregado provocará que cueste 0,71 céntimos: “El precio de una lata de Coca Cola subirá 0,06 euros”.

Teniendo en cuenta que la mayoría de refrescos tienen un precio similar al de la Coca Cola, el creador de SinAzucar.org nos demuestra que subirán unos cuantos céntimos. En bebidas como el Red Bull, algo más caras, el incremento será algo mayor. Si una lata cuesta 1,29 euros, tras aplicar el nuevo IVA pasaría a costar 1,41.