A la incertidumbre generada por el coronavirus, se une en las poblaciones bañadas por el Mar Menor el pésimo estado del agua de la laguna salada, que pone en serio riesgo la campaña veraniega, clave para el sector turístico de la zona. “Durante décadas las administraciones han dejado abandonado el Mar Menor, si a eso le unimos las cuatro Danas de este invierno, nos encontramos con que el agua está en unas condiciones lamentables”, afirma Nani Vergara, presidenta de la Asociación de Vecinos de Los Nietos.

La presencia de algas en descomposición y la acumulación de fango en el fondo marino mantiene cerradas numerosas zonas de baño a pocos días del inicio de la campaña veraniega. “En ciertos puntos del Mar Menor se acumula arena a pocos metros de la orilla, lo que se conoce como los secos, dejando el agua estancada y en muy mal estado para el baño, ya que no hay corriente marina que la vaya limpiando”, explican desde la Consejería de Medio Ambiente.

Especialmente preocupante es la situación de las playas de Los Urrutias y Estrella de Mar. En informe realizado hace 10 días, Salud Pública desaconseja el acceso a las zonas de baño de estas localidades por la acumulación de algas y cieno en estado de putrefacción tanto en el agua como en la arena. “Daba pena el estado de nuestra playa”, señala Elena Lledó, presidenta de la Asociación de Vecinos de Los Urrutias.

Para aliviar la delicada situación, la Consejería de Medio Ambiente ha enviado a 90 operarios para limpiar las zonas más afectadas y en tan solo dos semanas han retirado 280 toneladas de algas. “Esto es solo un parche. Es pan para hoy y hambre para mañana. Necesitamos que las tres administraciones, la local, la regional y la estatal se sienten a hablar y busquen una solución para el Mar Menor”, afirma Elena Lledó.

La ‘araña finlandesa’

Las esperanzas de los vecinos y los comerciantes de las localidades del Mar Menor están puestas en la Watermaster, una draga más conocida por su origen como la “araña finlandesa”, y que ya ha demostrado que puede limpiar el fondo de la laguna aspirando el fango, las algas y la arena que se acumula cerca de la orilla.

“Se hizo un ensayo en septiembre de 2018 con esta máquina y la Universidad de Murcia redactó un informe que avalaba la eficacia de la actuación sin provocar daños en la pradera marina, por lo que ambientalmente es mucho más viable que los sistemas de excavación mecánica que se utilizan en los fondos marinos”, explican desde la Consejería de Medio Ambiente. Una prueba piloto que realizó el gobierno regional, que no tiene competencias en la limpieza del agua, “para ofrecer al ministerio una solución”.

Fuente: niusdiario.es