Al Mar Menor cuando hay lluvias copiosas llegan residuos y sedimentos que empeoran su estado.

Se está pidiendo al Ministerio para la Transición Ecológica que acelere la aprobación del proyecto de vertido cero y que acometa las infraestructuras más urgentes para minimizar los efectos sobre el Mar Menor que producen estos episodios de lluvias. Estas medidas deberían declararse como actuaciones de emergencia, para ponerlas en marcha de manera inmediata sin esperar a la aprobación definitiva del Plan y estar preparados ante futuros fenómenos pluviales como este.

Se trataría, en concreto, de acelerar la puesta en marcha de aquellas medidas encaminadas tanto a minimizar las entradas de agua a través de las ramblas, como a la reducción del nivel del acuífero del Campo de Cartagena. Entre las primeras medidas figuran, por ejemplo, la limpieza de las mismas, la construcción de diques para disminuir la velocidad del agua y minimizar así el arrastre de sedimentos o la instalación de canales que eviten la desembocadura del agua en áreas sensibles, mientras que para recudir el nivel del acuífero y minimizar así sus aportes al Mar Menor se podrían iniciar actuaciones urgentes como la creación de pozos en la ribera de la laguna o la extracción de sus aguas para su posterior tratamiento, aprovechamiento y reutilización. En este sentido, la colocación de sensores de presión para conocer cómo pueden afectar esas entradas de agua al Mar Menor y los expertos en hidrogeología están analizando ya cómo se podría actuar para minimizar ese intercambio.

Esperemos que nuestro Mar Menor vuelva a ser una maravillosa laguna .