Un reciente estudio revela que el estrés por aislamiento motivado por el confinamiento tiene efectos psicológicos que pueden incidir en la actividad del sistema inmune y neuroendocrino. Ansiedad, depresión, miedo, insomnio o estrés son algunos síntomas habituales que muchos murcianos han sufrido durante estas semanas de confinamiento. Pese a que podríamos pensar que esta anómala situación nos ha dejado algunas secuelas al estar tanto tiempo confinados en casa, la realidad es bien distinta. Según señala, Marifé Lozano, presidenta de la Asociación Murciana de Salud Mental, los ciudadanos de la Región de Murcia han realizado un menor número de consultas a Salud Mental durante este confinamiento y desescalada si lo comparamos con otras comunidades como Madrid, Barcelona o Castilla-La Mancha donde la presión asistencial y de la población ha sido mucho más alta debido a un mayor número de casos.

Según nos cuenta Lozano “los ciudadanos han llevado el confinamiento mucho mejor de lo esperado al responder de una forma normal a esta situación y adaptándose rápidamente” lo que se ha traducido en un menor número de ingresos hospitalarios en la unidad de psiquiatría. Añade que el resto de pacientes se les ha atendido vía telefónica gracias a que el protocolo diseñado previamente por el SMS “ha funcionado bastante bien gracias a la buena respuesta de Sanidad que se anticipó en su respuesta”.

Por suerte, los enfermos crónicos y pacientes de salud mental no han sido el colectivo de riesgo olvidado en esta crisis de la COVID19 ya que “ha habido una supervisión periódica del estado de los pacientes vía telefónica, manteniéndose la actividad presencial únicamente para urgencias. También se ha habilitado varias líneas de atención psicológica para familiares de pacientes crónicos y para el personal sanitario que ha estado operativo y dando servicio”.

Según el Insituto Nacional de Estadística, en lo relativo a salud mental, una de cada diez personas mayores de 15 años ha sufrido en algún momento de su vida algún problema de este tipo y, de nuevo, las mujeres con un 14,1% lo refieren con mayor frecuencia que los hombres con un 7,2%.

“Entre los profesionales nos preocupa los familiares de las personas que han fallecido por la COVID-19 en la Región los cuales no han podido hacer el habitual duelo y despedirse de sus familiares por lo que podrían darse algunos casos en los que se requieran ayuda ya que se trata de una experiencia muy dura que animamos a que la afronten con ayuda profesional y una menos medicación. Pedimos a la población que realice y responda de forma colectiva ante la actual crisis que se avecina”, añade.

Precisamente desde la Asociación Española de Psiquiatría han lanzado un comunicado en el que recuerdan la importancia de mantener reforzada la Sanidad Publíca y su puesta en valor para seguir garantizando un servicio sanitario público de primer nivel. Lo mismo ocurre con la Atención Primaria y el aprovisionamiento de recursos materiales y tecnológicos, añaden en la nota. Entre sus demandas seguir garantizando la universalidsd de la sanidad pública estatal y evitando cualquier brecha. “Esta crisis nos ha mostrado la fragilidad y la capacidad de respuesta de nuestras organizaciones. No podemos volver a la normalidad como si nada de esto hubiera pasado, porque entonces no lo habremos hecho bien”, añaden.

Precisamente, relacionada con esta cuestión, el Equipo de Atención Psicosocial (EAPS) de la Orden Hospitalaria San Juan de Dios (OHSJD) en la Región de Murcia ha llevado a cabo recientemente una investigación nacional e internacional. La doctora María Rosa Castellano, psico-oncóloga y directora del Equipo de Atención Psicosocial del Programa para la Atención Integral a Personas con Enfermedades Avanzadas de la Fundación ‘la Caixa’ sostiene que “en el confinamiento aparecen efectos psicológicos negativos más intensos que pueden incidir en la actividad del sistema inmune y neuroendocrino, pudiéndose detectar los efectos psicológicos meses o incluso años más tarde”.

El EAPS desarrolla su labor profesional desde hace diez años en la Región de Murcia en los principales hospitales, Hospital Morales Meseguer, Hospital Virgen de la Arrixaca y Hospital Los Arcos del Mar Menor, complementándose con los equipos de oncología, hematología, medicina interna y geriatría.

Fuente: murciaeconomia.com