Los servicios municipales de San Javier intervinieron con maquinaria pesada en la playa de los Esculls, una Zona de Conservación Prioritaria.

La Asociación de Naturalistas del Sureste (Anse) denuncia la destrucción de flora protegida y hábitats de interés comunitario en la playa de los Esculls, al norte de La Manga, un espacio incluido en el Parque Regional de los Arenales y Salinas de San Pedro y que está considerada Zona de Conservación Prioritaria.

La asociación conservacionista presentó a mediados de la semana pasada un escrito a la Demarcación de Costas en Murcia, la Dirección General de Medio Natural y el Ayuntamiento de San Javier, «denunciando la alteración de la playa de los Esculls. Además, el mismo día teníamos una reunión con Demarcación de Costas por otro asunto y aprovechamos para comunicarles que las actuaciones, con maquinaria pesada, de los servicios municipales del Ayuntamiento de San Javier habían producido daños en la flora protegida y alterado un hábitat de interés comunitario», explica Jorge Sánchez, de Anse, y añade que desde Costas se comprometieron a analizar lo ocurrido para tomar medidas en caso necesario.

La denuncia formal también se presentó ante la Dirección General de Medio Natural, gestora del parque, y el Ayuntamiento de San Javier, responsable de las limpiezas de La Manga, pero en ninguno de los dos casos recibieron respuesta.

Según explica Sánchez, desde hace al menos tres años Anse viene poniendo en conocimiento de la Junta Rectora del parque estas actuaciones en la zona protegida, sin que desde la Dirección General de Medio Natural ni desde la dirección del parque se tomen medidas. «Ahora la situación se agrava porque junto a esta playa se ha instalado una colonia de charrancito común, considerada Vulnerable, que cría en la zona y podría abandonarla por las molestias producidas», afirma Jorge Sánchez, de Anse, que critica que el Ayuntamiento de San Javier realice estas ‘limpiezas’ en una zona del dominio público marítimo-terrestre, limítrofe con las Encañizadas, incluida en el Parque Regional de Salinas y Arenales de San Pedro del Pinatar y parte de la Red Natura 2000, ya que no son intervenciones previstas en el Plan de Ordenación de los Recursos Naturales del Parque Regional.

«Las limpiezas con maquinaria pesada han afectado a dos especies protegidas y amenazadas: la endémica esparraguera del Mar Menor (‘Asparagus macrorrhizus’), en peligro crítico de extinción, y el Senecio de las dunas (‘Senecio glaucus’), en peligro. Además, los restos los están tirando sobre un hábitat de interés comunitario del parque produciendo un daño irreversible», insiste Sánchez, que no entiende, además, «por qué se costea con dinero público una intervención que, además de perjudicar los valores ambientales de un espacio protegido, tiene por objeto permitir la celebración de eventos, sobre todo bodas, en un establecimiento privado colindante, que para ello ocupa el dominio público con sus instalaciones».

Fuente: laverdad.es