Palmo a palmo fueron inspeccionando todos los locales hosteleros que se encontraban a su paso en San Javier y Santiago de la Ribera. Un macrooperativo de la Guardia Civil, que contó con la colaboración de la Policía Local y la Inspección de Trabajo, se ha saldado, según fuentes policiales, con la tramitación de cincuenta actas contra establecimientos de copas y salas de apuestas «por carecer de diversa documentación».

El despliegue, que se produjo en la madrugada del sábado, pilló por sorpresa a los hosteleros. El Instituto Armado movilizó para los registros a 26 agentes de los puestos de Torre Pacheco y San Javier, así como de unidades especiales, como la de Seguridad Ciudadana (Usecic) y la de Fiscal y Fronteras. El macro operativo comenzó en la avenida San Francisco Javier. La llegada de quince vehículos oficiales despertó mucha expectación entre aquellos que estaban disfrutando de una noche de fiesta. También desató algún bulo, tal y como detallaron las mismas fuentes: «Hubo un momento en el que se llegó a decir por la localidad que se había producido un asesinato».

Nada más lejos de la realidad. Los agentes levantaron medio centenar de actas de sanción a locales de copas y establecimientos de apuestas por no haber informado del cambio de titularidad de la licencia de actividad o por carecer de extintores, entre otras irregularidades.

También se precintaron dos máquinas expendedoras de tabaco por no cumplir con la normativa. Durante los registros participaron los perros de la Unidad Cinológica y entre la clientela se incautaron algunas dosis de sustancias estupefacientes, que a falta de su análisis, todo apunta a que se trataría de cocaína y hachís. De hecho, se tramitaron ocho actas por tenencia de drogas. Y a otros dos clientes se les multó por ser sorprendidos por los agentes fumándose un pitillo dentro del establecimiento.

Incautaron un arma blanca

La caravana de vehículos oficiales también visitó locales situados en las avenidas Pinatar y La Unión. «Se iban buscando establecimientos conflictivos», precisaron las referidas fuentes. En cada inspección, las patrullas se colocaban a ambos lados de la puerta de acceso para evitar que nadie saliera hasta el final del registro.

Durante el macro operativo, los guardias civiles se incautaron de un arma blanca y levantaron cinco actas por infringir la ley de Extranjería. El despliegue concluyó pasadas las tres de la madrugada en Santiago de la Ribera. En total se inspeccionaron siete locales de copas y dos salas de apuestas.

Fuente: laverdad.es