La agricultura, el turismo y el urbanismo preocupan a las formaciones, que han lanzado sus propuestas para el entorno del Mar Menor.
Agricultura sostenible, moratoria urbanística, ventajas fiscales para establecimientos hoteleros o la desalación ecológica del agua del mar. Los partidos políticos pusieron ayer su mirada en el Mar Menor y en su entorno, así como en el sector agrario de la Región de Murcia para mostrar las medidas que atañen a dos cuestiones delicadas y con fuerte peso en la Comunidad. Por su parte, Ciudadanos avisaba ayer de que veía posible realizar una actividad agrícola y turística en torno a la laguna salada, ofertar un entorno único, y a la vez protegerlo. Desde Los Alcázares la candidata por la formación naranja a la presidencia de la Comunidad, Isabel Franco, remarcaba que están convencidos de «que es posible desarrollar una actividad agrícola que sea compatible con un modelo productivo en torno al turismo y, por supuesto, con la protección del Mar Menor». Franco considera que es posible complementar un modelo productivo en torno a la agricultura sostenible, y un turismo que acabe con la estacionalización y que permita que los empleos de la hostelería sean estables.
Respecto a esto último, la candidata del PP a la Alcaldía de Cartagena, Noelia Arroyo, propuso ayer un programa de ventajas fiscales para establecimientos hoteleros que sigan abiertos más allá de la temporada estival y su programa recoge la elaboración de un programa específico de Apoyo a las iniciativas comerciales en el entorno del Mar Menor.
«Trabajaremos desde el primer día para que las ordenanzas fiscales del próximo año contemplen la reducción de tasas e impuestos para establecimientos hoteleros que decidan prolongar su actividad más allá de la temporada estival. Si los hoteles no abren todo el año, no podemos vender La Manga todo el año, desde el Ayuntamiento debemos ayudarles con promoción del negocio, pero también bajando las cargas fiscales».
Desde Cambiar la Región de Murcia apostaron ayer por impulsar una moratoria urbanística para todos los espacios del Mar Menor, incluyendo los cascos urbanos consolidados y los planes aprobados o en trámite «en tanto no se apruebe la Ley de Protección Integral de la laguna», según dicen desde la formación. Respecto a los vertidos a la laguna, Cambiar ha llamado la atención sobre la urgencia de frenar, a través de mecanismos de control y eliminación, los vertidos al Mar Menor, «la mayoría procedentes de la agricultura intensiva, pero también del arrastre de las escorrentías mineras de materiales pesados».
Podemos, por su parte, desde Águilas hacían mención al sector agrícola proponiendo un nuevo modelo de producción agraria «donde la desalación es producida mediante la energía solar, abaratando costes y cuidando el patrimonio ambiental», como Parque Regional de Puntas de Calnegre- Marina de Cope.
Fuente: laopiniondemurcia.es