El C-101 se despedirá con crespón negro. Conocido como ‘Mirlo’ o ‘Culopollo’, el avión de entrenamiento básico en la Academia General del Aire de San Javier es seguro y fiable, de cómodo manejo y óptimas características aerodinámicas, según la mayoría de los expertos consultados, tanto pilotos como instructores del Ejército del Aire. Por algo lleva en los hangares de la base de Santiago de la Ribera casi 40 años. A pesar de la buena fama del ‘Mirlo’, la mayoría consideran «obsoleto» este avión de fabricación nacional, que deja en desventaja de potencia a la Patrulla Acrobática Águila ante los potentes Aermacchi italianos o el Alpha Jet francés. «Vamos a trabajar con tirachinas cuando otros tienen pistolas», describe un oficial del Ejército del Aire, que señala directamente a «las restricciones presupuestarias que en España han dejado huella en la modernización de la dotación militar».
Un factor que se repite en el análisis que los pilotos militares realizan sobre el avión que más tiempo ha servido al Ejército del Aire es la erosión a la que están expuestos en la base costera, aunque también coinciden en que se compensa con «un mantenimiento exhaustivo y un equipo mecánico de alto nivel».
El CASA 101 se encuentra al final de su vida operativa, que culminará en 2021. El Ministerio de Defensa aprobó el 22 de abril una partida de 225 millones para comprar el nuevo avión de entrenamiento que sustituirá al modelo actual, con el que el comandante Marín sufrió ayer el accidente mortal. El gasto se repartirá entre los ejercicios de 2020 a 2022, a razón de 75 millones por año. Con el concurso público aún abierto, todavía se especula en el entorno militar sobre el modelo de avión ideal para que los pilotos militares españoles se enfrenten a las misiones internacionales.
Entre los candidatos se encuentran el Beenchcraft T-6 Texan II estadounidense, el polaco PZL-130 Orlik 3, o el suizo Pilatur PC-21, considerados asequibles y de fácil mantenimiento. En los círculos militares se comenta también la posibilidad del M-346, un avión supersónico, o incluso del Eurofighter. Sin una alternativa de fabricación nacional, y con la absorción de CASA por parte de Airbus, todo apunta a que la patrulla Águila perderá su distintivo Patrio del avión con el rayo en la cola, que servía como escaparate de la industria aeronáutica española.
Fuente: laverdad.es