Levantar el cierre de la hostelería será «más llevadero si estamos unidos y le damos un nuevo impulso», asegura el presidente de la recién creada asociación de hosteleros y hoteleros de San Javier – Mar Menor, Hostesan, Francesco Leggio. Un grupo de empresarios jóvenes dio el paso adelante para adoptar medidas que revitalicen uno de los sectores más apagados por la pandemia, aunque la iniciativa va ganado socios y ya son una treintena. «Hay que estar unidos para captar ayudas, para lograr mejores condiciones de funcionamiento por medio de la cooperación y para subir el nivel del sector turístico», señala el presidente.

Leggio, cocinero y propietario del restaurante Nous en Santiago de la Ribera, asegura que «ya es un paso adelante abrir comunicación con el Ayuntamiento a nivel de grupo, porque antes cada uno tenía que enterarse por su cuenta de las medidas». «No surgimos para ser una amenaza, sino una colaboración estrecha», afirma.

El pasado octubre, durante las primeras reuniones del gremio, ya solicitaron al Consistorio ayudas directas, que se sumaran a medidas de auxilio a la hostelería, como la exención de las tasas de las terrazas en 2020 y 2021. El Ayuntamiento distribuirá este año 330.000 euros en subvenciones entre el comercio y la hostelería para compensar parte de las pérdidas ocasionadas por los cierres prolongados. Esta semana se darán a conocer las condiciones de acceso a estas ayudas económicas.

Hostesan espera que la Administración local sea uno de sus principales colaboradores en la organización de campañas y eventos que tienen previstos para cuando amaine la crisis sanitaria, aunque no serán los únicos. «Negociaremos con empresas distribuidoras y proveedores para lograr descuentos en los suministros. Comprar productos con precios un 10% más económicos es importante para los negocios», señala Leggio.

La primera campaña surgirá antes incluso de la reapertura de los locales, ya que pretenden que sirva «como impulso inicial». Crearán unos bonos de consumo de desayunos, comidas, cenas y alojamientos, que los clientes podrán comprar por adelantado con un incentivo sorpresa que aún preparan, aunque «nos gustaría que el principal gancho sea la voluntad de apoyar a un sector en crisis», señala el presidente de los hosteleros locales.

Después de los cierres intermitentes que han padecido en el último año y la pérdida de clientes por la desaparición del turismo, los empresarios viven su momento de mayor incertidumbre. Si en la segunda ola de contagios –el pasado otoño–, muchos se lanzaron a vender platos para llevar o servidos a domicilio, en esta tercera ola son muchos menos. Por eso Hostesan cree que el sector Horeca del municipio costero necesitará salvavidas que lo mantengan a flote para reiniciar su actividad y afrontar la que ya se presenta como una esquelética temporada de primavera y un más que dudoso verano en el Mar Menor.

Eventos gastronómicos
Más allá de los próximos meses, la unión de hosteleros planea organizar «semanas gastronómicas, que den protagonismo a los productos de la comarca del Mar Menor, como el caldero, la alcachofa o el langostino, al principio en cada local para evitar grandes concentraciones de público», explica Leggio.

Para el próximo año ya han planteado al Ayuntamiento dos proyectos anuales: «Queremos organizar una jornada gastronómica en San Javier en primavera, y un festival gastronómico en Santiago de la Ribera en septiembre, con degustaciones, ponencias y conciertos», adelanta.

Otra de las cuestiones que aborda es la dificultad para encontrar personal especializado en la hostelería. Ya le ha transmitido al concejal de Comercio, Héctor Verdú, «la urgencia de crear ese centro de formación para la hostelería», previsto en el edificio del antiguo ambulatorio de La Ribera.

Fuente: laverdad.es