Los primeros análisis descartan un episodio de anoxia en el Mar Menor tras la aparición de miles de peces muertos

Los primeros análisis realizados por la Consejería de Medio Ambiente en el agua del Mar Menor, concretamente en las zonas donde en la tarde del domingo comenzaron a aparecer alevines de peces muertos, descartan por el momento la posibilidad de que se trate de un episodio de anoxia, ya que los valores del oxígeno son normales.

«Desde la comunidad científica se apunta a que las elevadas temperaturas registradas en días anteriores podrían haber afectado de manera especial a los ejemplares más pequeños de ciertas especies», explicó un portavoz oficial de ese departamento, que señaló que siguen en marcha las averiguaciones para establecer las causas de la mortalidad de esos cientos de ejemplares localizados junto a las playas de Mar de Cristal y la Cala del Pino, entre otros lugares muy concretos. Agentes medioambientales y técnicos recogieron muestras en esas áreas, que son las que han permitido descartar ya que el episodio de mortalidad se deba a una drástica reducción de los niveles de oxígeno en el agua.

La plataforma SOS Mar Menor alertó este lunes, a través de redes sociales, de la aparición de un gran número de peces muertos en la zona sur del Mar Menor. Concretamente, se trata de ejemplares de pequeño tamaño detectados en las playas de Islas Menores, en la Lengua de la Vaca (Los Nietos) y algunas zonas de La Manga, como la Cala del Pino, según las imágenes difundidas también por algunos veraneantes.

Un portavoz de la Consejería de Medio Ambiente confirmó a LA VERDAD que, aunque la monitorización de los parámetros del agua es permanente, se están haciendo mediciones específicas para detectar cualquier situación anómala. También señaló que se han observado concentraciones importantes de camarones vivos en algunas zonas próximas a la orilla, aunque no se conoce si esta circunstancia está relacionada con la muerte de alevines en esos mismos lugares.

La Comunidad ha activado un dispositivo especial para retirar los peces y vigilar «de forma permanente» la zona, junto con agentes medioambientales, «sin que se haya registrado ninguna novedad hasta el momento».

La pasada semana el catedrático de Ecología de la Universidad de Murcia Ángel Pérez Ruzafa alertó, en el último informe de seguimiento sobre el estado ecológico de la laguna, de que «este año, con la entrada de agua y nutrientes que se ha mantenido durante todo el invierno y la primavera, es probable que el sistema tenga dificultades para recuperarse, y si se producen lluvias torrenciales a final de verano, podrían repetirse las circunstancias de 2019 y los efectos de las DANA de ese otoño».

La preocupación sobre el estado del Mar Menor ha reavivado las protestas vecinales en los últimos días. El pasado sábado, vecinos y veraneantes de una veintena de playas marmenorenses se manifestaron para exigir el reconocimiento de la personalidad jurídica de la laguna, de modo que pueda contar con derechos propios para su protección.

Los colectivos SOS Mar Menor, Ecologistas en Acción, Por Un Mar Menor Vivo y Pacto Por el Mar Menor emitieron un comunicado en el que alertaron de que debido a la «eutrofización del agua esta última semana, añadido a las altas temperaturas y vientos» se reúnen todos los factores necesarios para «un nuevo fenómeno de anoxia», algo que la Comunidad descarta por el momento.

«Pescadores en activo nos informan de que en el centro del Mar Menor no hay casi pescado, los plomos de las redes de fondo salen negros, la caulerpa se está muriendo en casi todas las batimetrías, excepto las aguas someras, y los peces atrapados en las redes se mueren en poco tiempo», aseguran en el comunicado.