La Guardia Civil de la Región de Murcia desarticuló un experimentado grupo criminal, de índole familiar, establecido en la costa de la Región de Murcia tras el desarrollo, durante un año, de la operación ‘Lodon’. La investigación se saldó con la detención de 14 miembros en San Javier y San Pedro del Pinatar como presuntos autores de los delitos de cultivo, elaboración y tráfico de droga, defraudación de fluido eléctrico, ocupación ilegal de vivienda, desobediencia grave, receptación y de pertenencia a organización criminal.

Se trata de nueve varones y cinco mujeres, con edades comprendidas entre los 18 y los 65 años, vecinos de los municipios mencionados. Cuatro de ellos ingresaron en prisión. En total, la operación sumó 40 arrestos porque también se desarrolló en Almería y Málaga, cuya organización se dedicaba al tráfico con destino al norte de Europa, especialmente Países Bajos.

En los 10 registros domiciliarios practicados en San Javier (8) y en San Pedro del Pinatar (2) se han incautado 325 plantas de cannabis sativa, varias dosis de cocaína, heroína y hachís, 2.00 euros, tres turismos y los útiles necesarios para el cultivo y la distribución de la droga. También se recuperaron numerosos objetos de ilícita procedencia, supuestamente procedentes del robo y asociados al tráfico de sustancias estupefacientes, algunos de los cuales fueron identificados y devueltos a sus legítimos propietarios.

La operación se inició hace un año, cuando la Guardia Civil detectó varios puntos de venta de droga al menudeo en distintas viviendas del municipio de San Javier, lo que había generado alarma social entre los vecinos, según la Guardia Civil. La investigación desarrollada permitió ir conociendo la identidad de las personas vinculadas con este entramado delictivo, un grupo criminal de índole familiar asentado en el Mar Menor que controlaba la venta de sustancias estupefacientes en la comarca y que también distribuía a otros clientes de localidades y provincias limítrofes.

La Benemérita fue recabando detalles e indicios que permitieron ir ubicando las viviendas sospechosas de albergar plantaciones de marihuana, así como otras destinadas al establecimiento de puntos de venta de droga al menudeo, algunas de las cuales, además, habían sido ocupadas ilegalmente por los sospechosos. El análisis de la información obtenida fue puesto en conocimiento de la autoridad judicial, quien otorgó los mandamientos de entrada y registro.

Cerca de un centenar de guardias civiles
La Guardia Civil estableció un operativo, formado por cerca de 100 efectivos, para llevar a cabo la entrada y registro de los inmuebles. La intervención policial se saldó con la localización de tres plantaciones de marihuana en su modalidad ‘indoor’, todas ellas en plena producción y a punto de ser cosechadas debido al avanzado estado de floración de las plantas, donde se incautaron más de 300 plantas de cannabis sativa. Para ello, el suministro a la red eléctrica había sido conectado de forma fraudulenta.

Esos invernaderos contaban con abundante material destinado al cultivo intensivo de las plantas, tales como aparatos luminosos, eléctricos y electrónicos, de climatización y de jardinería, herramientas, fertilizantes y abonos, entre otros, todo lo cual ha sido intervenido. Distribuían hasta cuatro tipos distintos de sustancias estupefacientes

Entre las sustancias estupefacientes había marihuana, cocaína, heroína y hachís, que fueron aprehendidas. También se incautaron de 2.000 euros en billetes fraccionados y recuperados numerosos objetos de ilícita procedencia (herramientas profesionales, tabletas, ordenadores portátiles y equipos de música, entre otros) supuestamente receptados, algunos de los cuales ya han sido identificados y devueltos a sus legítimos propietarios.

Frenética actividad para distribuir la droga
Algunos de sus miembros se mantenían muy activos y no respetaban las normas de movilidad decretadas por el estado de alarma. Se desplazaban hasta las plantaciones de marihuana para mantener su cuidado, así como para transportar la droga a los puntos de distribución. Estos movimientos no pasaron inadvertidos a los agentes que, además, atribuyen a alguno de los arrestados la autoría de delito de desobediencia por saltarse el confinamiento en numerosas ocasiones.

Fuente: laverdad.es