En un escenario de al menos 2 millones de personas infectadas por coronavirus y 123 000 muertos en todo el mundo, según informa el director de la Organización Mundial de la Salud, Tedros Adhanom Ghebreyesus , algunos países están considerando aligerar las restricciones sociales y económicas puestas en marcha para frenar la expansión de la pandemia.
Para el máximo responsable de la OMS, “esto es algo que todos queremos, pero debe hacerse con mucho cuidado. Si se hace demasiado rápido, corremos el riesgo de un resurgimiento que podría ser incluso peor que nuestra situación actual”. Para Ghebreyesus lo más importante es proteger la salud humana y guiarnos por lo que ya sabemos del coronavirus. Sobre el nuevo coronavirus, el doctor apunta que la OMS sigue aprendiendo día tras día sobre él y ajusta su estrategia a la evidencia que se va teniendo en cada momento.
Seis condiciones para aligerar el confinamiento
El doctor Ghebreyesus habla de seis condiciones que un país debería cumplir a la hora de empezar a levantar las restricciones. Son las siguientes:
1. La transmisión de la COVID-19 debe estar controlada.
2. El sistema de salud del país debe ser capaz de detectar, probar, aislar y tratar cada caso, así como rastrear cada contacto.
3. Se tienen que poder minimizar los riesgos en entornos especiales (por ejemplo, las residencias de ancianos).
4. Las medidas preventivas en lugares básicos a los que va la gente, como centros de trabajo y escuelas deben estar aseguradas.
5. El riesgo de importación de nuevos casos debe estar bajo control.
6. La sociedad debe estar completamente educada y concienciada para ajustarse a la “nueva norma”.
Ghebreyesus ha aprovechado para reiterar que todos los sectores afectados por la COVID-19, incluyendo los mercados de alimentos, necesitan garantizar que cumplen con altos sistemas de regulación y elevados estándares de limpieza, higiene y seguridad en el momento en el que vayan a reanudar su actividad.
Por otro lado, un artículo publicado recientemente en Science y realizado en su mayoría por investigadores de la Universidad de Harvard, estima que las medidas de distanciamiento social, no de confinamiento, podrían extenderse a 2022 para frenar de manera efectiva la propagación del nuevo coronavirus y la saturación de los centros sanitarios. “Para mitigar la posibilidad de resurgimiento de la infección, pueden requerirse períodos prolongados o intermitentes de distanciamiento social. Después de la ola pandémica inicial, el SARS-CoV-2 podría seguir a su pariente genético más cercano, el SARS-CoV-1, y ser erradicado por medidas intensivas de salud pública después de causar una epidemia breve pero intensa. Pero cada vez más, las autoridades de salud pública consideran que este escenario es poco probable”
Fuente: muyinteresante.es
