Seprona
La semana pasada escribía sobre la fiesta náutica que unos individuos, totalmente insolidarios, organizaron en sus barquitos, frente a la isla del Ciervo en el corazón del Mar Menor, con absoluto desprecio al ecosistema y a las leyes que lo protegen. Una fiesta inútil que en principio solo servía para su propio divertimento y para hacerlos creer que estaban en la costa azul, que sus barquitos eran yates de recreo y que imitaban las fiestas que se realizan en Niza o en Saint Tropez, con champán en lugar de cerveza y con copas de Chateau Petrus, en lugar de Don Simón. Sin embargo, esta vez, el inútil gesto si ha tenido una repercusión positiva; las autoridades han reaccionado ante el despropósito, han visto que ese tipo de fiesta, de proliferar será un perjuicio para la laguna costera y han decidido actuar.
Han creado una unidad del SEPRONA (Servicio de protección a la naturaleza) de la Guardia Civil, que se encargará exclusivamente de la protección del Mar Menor.
Esto sin duda es una buena noticia para la comarca y para los intereses de la laguna. Un grupo de agentes de la Guardia Civil que vele por que las leyes de protección al ecosistema, así como las medioambientales, se cumplan. Regadíos ilegales, vertidos al mar, fiestas, como la tan mencionada, construcciones descontroladas y un largo etcétera de actividades que llevan aparejado el deterioro del ecosistema y provoca los, tan nefastos, episodios de anoxia en las aguas de este patrimonio natural que tenemos en la Región de Murcia y que tanto tiempo hemos tenido desprotegido y del que tanto hemos abusado.
En estos momentos, la nueva unidad de SEPRONA se encuentra en la fase de selección de personal, entre guardias civiles de toda España que posean la capacitación para cumplir su misión, pero pronto los podremos ver patrullando las costas, los campos en torno al Mar Menor y surcando las aguas con sus embarcaciones, vigilando y protegiendo.
Una satisfacción para los ciudadanos que queremos ver nuestra laguna protegida, será un orgullo verlos patrullar, preservando el ecosistema y su entorno, vigilando el cumplimiento de las normas de protección del Mar Menor, sancionando a los infractores, con la eficacia que todos conocemos de la Guardia Civil.
Personalmente lo considero una gran noticia, así la función de investigación de los ilícitos y la facultad sancionadora sale del entorno político y deja de recaer en funcionarios autonómicos o de la CH del Segura, de los que no dudo de su eficiencia, pero que pueden y de hecho están mediatizados políticamente en base a intereses partidistas y cuyos informes, es muy fácil que caigan en el montón de los papeles olvidados y los que ven como su propuesta de sanción nunca se ejecuta.
El hecho que la responsabilidad, por fin, recaiga en las Fuerzas y Cuerpos de Seguridad del Estado, garantiza que dichos informes y propuestas de sanción, con el formato de atestado, será visto por autoridades administrativas o judiciales, según la gravedad, que en principio no tienen esa mediatización política.
Podrán investigar la veracidad de las documentaciones aportadas por pescadores, agricultores, constructores, sobre la viabilidad y sostenibilidad de sus proyectos y actividades, podrán sancionar la pesca furtiva y las fiestas ilegales, sin pararse a valorar el amiguismo, los padrinazgos o los intereses electorales del partido político de turno que esté gobernando en cada momento.
Confió en la buena labor de la Guardia Civil, confío en su eficacia y en su imparcialidad y por eso no puedo dejar de alegrarme de una medida que ha tardado bastante en ser puesta en marcha, pero que nunca será tarde si las consecuencias y efectos son buenos, y bueno es todo lo que sea bueno para el Mar Menor, todo lo que contribuya a detener su deterioro, cada vez más rápido y ayude a su regeneración. Ojala que la intervención del SEPRONA en esta materia, ayude a que volvamos a ver el Mar Menor de nuestra niñez, de aguas salinas, transparentes y llenas de fauna viva.
Es un deseo que creo compartir con la inmensa mayoría.
Antonio F. Samper
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