Sin hacer prisioneros

Si algo me enorgullezco es de saber conservar a mis amigos. No en vano sigo relacionado con unos compañeros de la EGB y del Instituto y después de tantos años nuestra amistad no se ha deteriorado ni un poco. Asimismo, estoy en un grupo de WhatsApp, con unas compañeras de la juventud y que tengo el honor de ser el único miembro masculino.

Digo esto para que no penséis que soy un sieso mal encarado, pero ciertamente tengo una edad y ya me da igual hacer más amigos, conservando los que tengo me es suficiente. Esto me llevaría a no escribir este artículo, pero dicho lo anterior entenderéis que me da igual y lo escribo.

Nadie puede negar que hemos pasado dos años de total oscuridad, entre confinamientos y restricciones, por fin se puede viajar con mínimas precauciones y la gente tenía ganas de salir y los negocios costeros ganas que salieran; pues bien, la primavera ha florecido y los habitantes de las ciudades se han tirado en masa hacia las playas después de dos años, San Javier no ha sido una excepción, las playas, las terrazas, los negocios de Santiago de La Ribera y de La Manga tienen una buena afluencia de público que quiere disfrutar del buen tiempo tras estos dos años oscuros.

El municipio debería haberse vestido de gala, con las playas de La Manga regeneradas, los viales en condiciones etc.

Todos hemos visto el destrozo que han hecho las recientes lluvias en las calles de todas las localidades del municipio. Lo digo porque soy ribereño y me duele ver mi pueblo así, pasar de ser “la perla del Mar Menor” ha ser el bache que rompe ruedas.

Las avenidas Academia General del Aire y Patrulla Águila, tienen unos socavones a lo largo de todo su trayecto muy apropiados para un reventón de una rueda o que un motorista pierda el control, en caso de no verlos y no poder esquivarlos.

Dudo que sean las únicas deterioradas por las lluvias, supongo que en San Javier y en La Manga, así como en otras pedanías habrá pasado algo similar, y ¿Qué ha hecho el Ayuntamiento? Pues nada. Esperaban otra cosa.

Están embarcados en dos proyectos esenciales para el municipio: la reparación de la avenida Aviación Española, para convertirla en una vía emblemática, para la que han tenido que cortar el trafico por una de las arterias principales de San Javier durante cuatro meses, con lo que supone para los habitantes del municipio y de cualquiera que nos visite y, en especial, construir un nuevo auditorio municipal cubierto. Como digo esenciales para la marcha del consistorio.

Entiendo que cualquier cargo público querrá dejar para la posteridad una macro obra por la que se le recuerde cuando abandone el gobierno y todos los servicios municipales, sin contar todos los fondos públicos, se van hacia el proyecto, con la intención que alguna vez les sirva de mausoleo, pero dejar de lado las necesidades más básicas como el alumbrado público, los viales, o los servicios sociales para hacer unas obras a mayor gloria del alcalde de turno no es de recibo.

Por qué motivo los próceres del municipio no piensan que van a ser más recordados si mantienen el municipio impoluto, con todos sus servicios funcionando, para que a la vez funcionen los negocios que tiene sede en él, más en fechas como estas en la que se esperaba una afluencia de turistas alta y que se han encontrado con un pueblo decrépito y casi destrozado.

Basta ya de caprichos faraónicos y vamos a facilitar la vida a los vecinos. Se que con este articulo no hago amigos, pero tampoco estoy por hacer prisioneros y me da igual.

Antonio F. Samper

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